Daniel Auteuil dirige y protagoniza la película Presunción de inocencia, basada en una historia real.
Desde que logró la absolución de un asesino reincidente, el abogado Jean Monier no acepta más casos criminales. Sin embargo, al conocer a Nicolas Milik, un padre de familia acusado de asesinar a su esposa, Monier se siente conmovido y sus certezas se tambalean.
Convencido de la inocencia de su cliente, está dispuesto a hacer todo lo posible para ganar el juicio.
Lo que parece un caso ordinario, este le pondrá a prueba, redescubriendo así el verdadero sentido de su vocación.
