Armand Rovira se lanza a la tarea de filmar cartas para enviárselas a Paul Morrisey, director de Trash, Flesh y Heat, colaborador de Warhol y de la Velvet Underground, empleando una cámara de 16mm que filmó el Magical Mistery Tour de los Beatles y antes perteneció a Cassavetes.
Oda al sueño experimental
Elsa Fernández-Santos 29 NOV 2019 - 03:48 CEST
El filme está compuesto por cinco misivas al hombre que, de la mano de Warhol, se convirtió en el director de cabecera de la Factory.