Jeanne Herry dirige la película dramática francesa En buenas manos.
Theo acaba de nacer. Después de dar a luz, su madre biológica le entrega a un programa de adopción.
Los servicios de adopción deben encontrar entonces a la que se convertirá en su madre adoptiva.
En el otro extremo, Alice lleva casi diez años luchando por ser madre.
Un grupo de profesionales trabajará para que Theo y Alice puedan reunirse.

El vértigo de lo desconocido

Javier Ocaña 3 MAY 2019 - 03:30 CEST
La película definitiva en materia de adopción en país propio por su ternura, su complejidad y una ambición arropada por un cálido disfraz de sencillez.