Francia, finales del siglo XIX. Joseph Ferdinand Cheval es un cartero que viaja todos los días por las aldeas de la región de Drôme.
Un día conoce a la mujer de su vida, Philomène, y de su unión nace Alice, a quién ama más que a nadie.
Por ella, Cheval se propone un objetivo: construir un palacio increíble con sus propias manos.
Pese a las dificultades, Cheval no se rinde y dedica 33 años a construir una obra extraordinaria que llamó la atención de artistas como André Breton o Pablo Picasso, y que aún hoy es famosa en Francia.