Gabriel es un prometedor fiscal cuya vida se tambalea cuando recibe una llamada de la policía. Ha habido un suicidio colectivo de una secta en las islas Canarias y su hermana pequeña, Cordelia, era una de las adeptas. Su cadáver no ha aparecido. Gabriel lleva años sin ver a su hermana: algo sucedió entre ellos y sus vidas tomaron rumbos opuestos. Inmediatamente viaja a la isla para conocer los sucesos de primera mano y ayudar en la investigación. Allí conoce a Helena, amiga de Cordelia, de fuerte personalidad y emociones a flor de piel. Ella y Gabriel conectan inmediatamente, unidos por el deseo de encontrar viva a Cordelia. Muy pronto Gabriel descubre que su hermana se acercó a La Comunidad seducida por la líder de la secta, una mujer de gran magnetismo y oscuro origen.
El refugio pagano

Javier Ocaña 3 JUN 2016 - 15:14 CEST
Relato de múltiples ramificaciones, quizá demasiadas, aunque más por su indolente tratamiento que por su cantidad, arranca bien. Luego se pierde.