Just Philippot debuta en la dirección con la película de terror francesa La Nube.
Para salvar su granja de la quiebra, una madre soltera se lanza a una arriesgada cría de saltamontes comestibles.
Sin darse cuenta, desarrolla un extraño vínculo obsesivo con ellos que la llevará a enfrentarse a los campesinos de la región y a sus propios hijos, que ya no la reconocen.